1) La realidad del multilingüismo, tanto de los alumnos como de los profesores en el proceso de enseñanza–aprendizaje, o de la educación en inglés en varias comunidades autónomas no es algo neutro o irrelevante, hay interacciones entre la lengua en la que nos expresamos habitualmente y las matemáticas que queremos aprender y enseñar. El conocimiento de la situación sin ideas preconcebidas facilitará encontrar soluciones adecuadas a los retos que se plantean y de los cuales deberían ser conscientes los responsables educativos
2) Desde el ámbito de la lingüística podemos acercarnos a la comprensión de las matemáticas reflexionando sobre los enfoques: comunicativo (la formulación matemática es un discurso con propósito); contextualizado (relacionando matemáticas con el entorno, motivación e identidad del sujeto) y cognitivo (asumiendo que saber matemáticas es comprender y producir formulaciones escritas).
3) Las novelas y la literatura matemática en general son una fuente de recursos y actividades para el aula, no solamente como motivación para los estudiantes y para aumentar su cultura matemática sino también para favorecer un aprendizaje “complementario” al habitual que fomenta la creatividad y la madurez en su formación.
El lenguaje gráfico de los comics y el humor es también un recurso educativo especialmente creativo que tiene gran atractivo para los estudiantes como elemento motivador y de estímulo de la lectura en matemáticas.
4) El mundo interactivo “2.0” y el avance espectacular de las redes sociales y otros mecanismos de comunicación muy familiares a nuestros estudiantes ofrecen un reto muy importante para el proceso de enseñanza–aprendizaje de las matemáticas: cómo utilizar ese aparataje como recurso educativo sin perder de vista su mero carácter de herramientas y que su uso requiere de una preparación previa del profesor que debe de tener muy claro qué objetivos persigue y qué metodología va a emplear.
5) Con el trasfondo de los informes PISA y las competencias lectora y matemática, se constatan las dificultades para el aprendizaje del lenguaje formal para lo cual es importante el proceso de verbalización previo en el lenguaje cotidiano.
6) Las revistas de las sociedades matemáticas que tienen un carácter formativo, de difusión del conocimiento y de intercambio de experiencias educativas ofrecen un gran potencial para mejorar el proceso de enseñanza–aprendizaje de las matemáticas y para cohesionar a la comunidad matemática vinculada a las sociedades.
7) La divulgación persigue transformar la información en conocimiento. Por tanto la línea que la separa de la educación es difusa y se puede ver ésta como una forma de divulgación que a la información añade la for-mación. El éxito en el aula será mayor si el docente consigue despertar el entusiasmo en el estudiante para que tenga una posición activa. En las distintas ponencias de la Escuela se han dado varios ejemplos en los que se ponen de manifiesto escenarios en los que el alumno no solo es capaz de gestionar sino también de generar la información.
La reflexión y debate conjuntos entre profesores de matemáticas de los distintos niveles educativos e investigadores en Didáctica de las Matemáticas que tiene lugar en cada edición de la Escuela de Educación Matemática “Miguel de Guzmán” permite abordar las problemáticas tratadas con una visión más completa y enriquecedora, siempre con el objetivo de fondo de mejorar y dotar de mayor calidad al proceso de enseñanza–aprendizaje de las matemáticas impulsando el intercambio de experiencias entre las etapas educativas.