Ya está disponible la versión electrónica del número 17-2 (2014) de La Gaceta de la Real Sociedad Matemática Española. Se puede consultar en la dirección gaceta.rsme.es. En La Gaceta se ha decidido dedicar estas portadas del volumen 17 de la revista, a Martin Gardner, por el centenario de su nacimiento. El 1 de abril de 1975, Martin Gardner publicó un mapa con 110 regiones y afirmó que se necesitaban cinco colores para colorearlo. En muchos países, incluido EE. UU., el 1 de abril se gastan bromas y para el mapa que proponía Garder cuatro colores bastan, como se puede ver en la portada.
Llamamos colorear un grafo a asignar un color a cada uno de sus vértices de manera que, si dos de ellos están unidos por una arista, sus colores sean distintos. En 1852, el sudafricano Francis Guthrie postuló, mientras era estudiante en el University College de Londres, que cuatro colores eran suficientes para colorear cualquier grafo plano, por ejemplo el que se obtiene a partir de un mapa en el que todas las regiones sean conexas poniendo un vértice por cada región y uniendo con una arista los vértices correspondientes a regiones adyacentes —Guthrie formuló su conjetura en términos de mapas, y llegó a ella coloreando un mapa de los condados ingleses—. Percy J. Heawood probó en 1890 que cinco colores bastaban, pero durante más de cien años nadie fue capaz de resolver el problema de Guthrie. De hecho, el 1 de abril de 1975, Martin Gardner, a quien estamos dedicando en su centenario las portadas de La Gaceta, publicó el mapa con 110 regiones que aparece a continuación y afirmó que se necesitaban cinco colores para colorearlo:
Nuestros lectores posiblemente reconozcan la fecha del 1 de abril como el día en que en muchos países, incluido EE. UU., se gastan bromas y, efectivamente, para el mapa que proponía Garder cuatro colores bastan, como se puede ver en la portada. Un año después de la ingeniosa inocentada de Gardner, Kenneth Appel y Wolfgang Haken demostraban, con la entonces controvertida ayuda de un ordenador, el Teorema de los Cuatro Colores: Francis Guthrie estaba en lo cierto.