Se requiere que los solicitantes acrediten una actividad investigadora intensa, desarrollada de forma continuada en el tiempo y centrada en unas líneas de investigación que permitan establecer cuál es su campo de investigación.
Una vez más vemos cómo las leyes perjudican a las personas que, por causas familiares y, muy especialmente, por tener hijos, se ven obligadas a hacer un parón en su carrera.
Podemos preguntarnos: y si una mujer tiene dos o tres hijos durante ese periodo de cinco años, con lo que no puede acreditar que su investigación se ha desarrollado de forma continuada en el tiempo, ¿será perjudicada por este párrafo? Lamentablemente, desde la Comisión Mujeres y Matemáticas de la RSME hemos oído casos en los que esto se produce: acreditaciones denegadas por periodos de uno o dos años de aparente inactividad, coincidentes con el momento en el que las interesadas han tenido uno o varios hijos. Una flagrante injusticia específica contra las mujeres que, una vez más, se ven obligadas a compensar con muchísimo más talento que los hombres cada hijo que tiene para poder competir. Se puede consultar más información aquí.
Desde la Comisión hacemos un llamamiento a las personas del mundo académico que asesoran a la ANECA para que, con carácter urgente, traten de modificar esta normativa incluyendo una mención a posibles periodos de inactividad justificada por cuestiones familiares, en particular, por maternidad y por cuidado de personas dependientes.