Catedrática de la Universidad de Oviedo, Consuelo Martínez atesora una extraordinaria trayectoria científica, con contribuciones fundamentales en el área del álgebra. En concreto, son referentes sus trabajos sobre álgebras y superálgebras no asociativas, sus relaciones con la teoría de grupos y sus aplicaciones a la criptografía. Con una labor incansable de organización y apoyo a la comunidad matemática en todos sus niveles, la profesora Martínez ha sido investigadora principal de numerosos proyectos, organizadora de congresos en España y en otros países, conferenciante plenaria y codirectora de la Revista Matemática Iberoamericana, entre otros méritos.
La catedrática valora la especial importancia de este reconocimiento que “supone una muestra de afecto y consideración por parte de mis colegas españoles”. Martínez asegura sentirse afortunada de trabajar en lo que le gusta, “siempre desde la honestidad, dando lo mejor de mí misma y procurando servir y ayudar a la comunidad matemática”. “No he pensado nunca en hacer algo para conseguir un beneficio directo, sino tratando de hacer las cosas bien”, añade. Tras años cargados de responsabilidades de gestión, su objetivo pasa ahora por dedicar más tiempo a la investigación, “con la que realmente disfruto”. En este sentido, asegura que “hay mucha gente valiosa y más joven para tomar el relevo, y eso se ve en la RSME, pero, por supuesto, mientras pueda siempre estaré ahí para ayudar en lo que sea de utilidad para la comunidad matemática española y aportar lo que esté en mi mano”.
Profesor titular de la Universidad Autónoma de Madrid en el área de álgebra, Adolfo Quirós ha desarrollado una extensa y muy eficaz dedicación a las matemáticas, desde la RSME y desde otros organismos, en relación con la mejora del sistema educativo, la divulgación y la consolidación de la comunidad matemática a nivel nacional e internacional. Con una dilatada labor divulgativa, destaca también su participación en proyectos matemáticos de la UE o en la comisión que redactó el Libro Blanco del grado de Matemáticas para la ANECA, entre otros. Quirós recibe la medalla con “inmensa alegría, sobre todo porque es un reconocimiento de mis compañeros de profesión y de fatigas y porque me lo concede una sociedad científica con la que siento una intensa vinculación”. “Más allá de lo personal, que se me otorgue la medalla de la RSME a la vez que a dos matemáticos de altísima talla, como son Consuelo Martínez y Juan Luis Vázquez, confirma lo que ya se vio en ediciones anteriores: la RSME valora realmente todos los aspectos del quehacer matemático. Me parece importante que una sociedad como la nuestra manifieste públicamente que hay tareas que quizás no lucen en un currículo estándar pero que son interesantes para la comunidad”, precisa.
El profesor Quirós manifiesta que su principal motivación ha sido siempre “hacer cosas en las que pensaba que podía ser útil”, al tiempo que añade que “los únicos méritos que me puedo atribuir son el entusiasmo y el interés por intentar cosas nuevas”. A corto plazo, su próximo objetivo será preparar un curso sobre Criptografía y Curvas Elípticas en la Escuela de Doctorado de Verano de la Universidad de Viena, que reúne durante una semana a todos los doctorandos en matemáticas, sin importar su campo de especialización. A más largo plazo, declara su intención de reforzar su relación con la enseñanza no universitaria y de “intentar seguir haciendo razonablemente bien cosas con las que disfruto, como dirigir La Gaceta, coordinar los desafíos matemáticos de Navidad, continuar la investigación en marcha con mis amigos de la universidad de Rennes o aportar mi granito de arena en la formación de las jóvenes generaciones”.
Profesor emérito y excatedrático de Matemática Aplicada de la Universidad Autónoma de Madrid, Juan Luis Vázquez cuenta con una extraordinaria y extensa trayectoria tanto científica como de liderazgo en la matemática española: “Me siento muy honrado por el reconocimiento que supone para mí la concesión de la medalla de la RSME, que recibo en mi segundo año como emérito tras una vida investigadora universitaria de más de cuarenta años”. En ese tiempo, el profesor ha obtenido numerosos reconocimientos por sus trabajos en el área de las ecuaciones en derivadas parciales no lineales. Vázquez fue conferenciante plenario en el International Congress of Mathematicians 2006, el único matemático español hasta la fecha que ha recibido este honor; Premio Nacional de Investigación Julio Rey Pastor (2003), y fue elegido Fellow of the American Mathematical Society. Además de su intensa actividad divulgadora e investigadora, con más de 275 artículos de investigación publicados, ha sido presidente de la Sociedad Española de Matemática Aplicada, coordinador del Comité Español del Año Mundial de las Matemáticas y presidente de la Comisión Científica de la RSME, entre otros servicios a la comunidad matemática española.
Juan Luis Vázquez recuerda que durante gran parte de los años 80 participó intensamente con otros jóvenes matemáticos y científicos en el movimiento para importar a España los modos y ritmos de la investigación internacional puntera, que él adquirió principalmente en Francia y Estados Unidos. Recuerda como un hito el éxito de la celebración del Año Mundial de las Matemáticas (2000), en el que “nos percatamos de que la ciencia española estaba llegando a niveles homologables de desarrollo”. Y destaca también momentos importantes que “marcaron mi vida profesional y en los que la RSME estuvo a mi lado, como el Premio Nacional de Investigación, los cursos UIMP, el trabajo para visibilizar la ciencia en COSCE y, sobre todo, mi charla plenaria en el congreso mundial de matemáticos ICM2006”.