La RSME ha enviado a los grupos parlamentarios del Congreso un documento relativo a la enseñanza de las Matemáticas en el Bachillerato LOMLOE. Esta iniciativa, que ha sido asumida también por el CEMat, trata de evitar que las asignaturas de Matemáticas y de Matemáticas Aplicadas a las Ciencias Sociales dejen de ser obligatorias en las modalidades de Ciencias y de Humanidades y Ciencias Sociales, respectivamente.
En el documento, la RSME explica que solicitó al Ministerio de Educación y Formación Profesional que recogiera la obligatoriedad de estas materias en el proyecto de Ley Orgánica por la que se modifica la Ley Orgánica 2/2006, de 3 de mayo, de Educación, petición que fue desoída. En este contexto, subraya que la optatividad de las Matemáticas en ambas modalidades suscita una enorme preocupación en la comunidad matemática y en toda la comunidad científica, ya que el alumnado podría finalizar la modalidad de Ciencias sin haber estudiado Matemáticas o la modalidad de Humanidades y Ciencias Sociales sin haber cursado la materia de Matemáticas Aplicadas a las Ciencias Sociales.
La RSME considera muy grave la situación a la que se aboca a la educación matemática y científica de nuestro alumnado. En este sentido, destaca que los estudios sobre abandono universitario apuntan que el primer curso universitario es el más crítico dado que, en todos los grados de Ciencias, de Ingeniería y Arquitectura y de Ciencias de la Salud se imparten asignaturas de fuerte contenido matemático que el alumnado no podrá afrontar con garantías sin haber cursado matemáticas en el Bachillerato.
Añade que resulta especialmente preocupante la situación en los grados de Ingeniería y Arquitectura, que acumulan en media las peores tasas de rendimiento, y que en casi todos los grados de Ciencias Sociales hay asignaturas de fuerte contenido matemático y estadístico (caso de Economía y Empresa) y en otros, como los de Educación Infantil y Primaria, resulta imprescindible un conocimiento de los contenidos matemáticos que se enseñarán como maestro o maestra.
Hacer optativas las matemáticas ahondará en este problema, reducirá las tasas de éxito, aumentará el abandono universitario y hará más ineficiente el sistema, que espera que la situación se corrija a través de las enmiendas oportunas, para que España no sea una excepción en los países de nuestro entorno en lo que a formación matemática de los estudiantes de los niveles no universitarios se refiere.