Científico titular del CSIC en el Instituto de Ciencias Matemáticas (ICMAT), que dirige desde 2022, Javier Aramayona ha sido nombrado vicepresidente del ERCOM, el comité de la Sociedad Europea de Matemáticas que integra a los centros europeos más importantes en la disciplina, entre ellos el Basque Centre for Applied Mathematics (BCAM), el Centre de Recerca Matemàtica (CRM) y el propio ICMAT, que este año ha renovado su acreditación como Centro de Excelencia Severo Ochoa por cuarta vez.
Pregunta.- ¿Qué supone esta renovación de la acreditación y cuáles son las claves que explican esta trayectoria?
Javier Aramayona.- Esta cuarta acreditación Severo Ochoa constituye un gran reconocimiento a la labor científica del ICMAT, además de ser una importante inyección de motivación para seguir adelante con nuestro trabajo. Asimismo, reafirma el excelente momento que vive la matemática española. Para este periodo, el ICMAT sigue apostando firmemente por programas innovadores, tanto en investigación como en formación. Un ejemplo destacado es nuestro programa de Laboratorios y Profesorado Visitante Distinguido, diseñado para fortalecer grupos de investigación en torno a matemáticos y matemáticas de renombre. En esta cuarta edición del programa, hemos incorporado al ICMAT a 14 figuras clave del ámbito internacional, cuatro de ellas mujeres.
P.- ¿Cómo valora la potencia del ICMAT como centro de investigación tanto en el ámbito nacional como en su proyección internacional?
J. A.- Desde su fundación hace poco más de 15 años, el ICMAT se ha consolidado como un centro relevante dentro de la escena matemática nacional e internacional. Por una parte, su naturaleza como centro mixto del CSIC y tres universidades madrileñas (UAM, UCM, UC3M) le convierte en un elemento vertebrador clave de la investigación matemática de la región de Madrid. Además, gracias a nuestras diversas iniciativas, como el mencionado programa de Laboratorios y Profesorado Visitante Distinguido, el instituto ha logrado atraer a cientos de visitantes anualmente, posicionándose como un referente de actividad matemática dentro de la comunidad científica internacional.
P.- Recientemente ha sido nombrado vicepresidente del ERCOM, ¿qué supone este nombramiento y cuáles son los retos que se plantean en este comité?
J. A.- Asumir la vicepresidencia de ERCOM supone un reto ilusionante y agradezco profundamente al nuevo presidente, Christophe Ritzenthaler (Centre International de Mathématiques Pures et Appliquées, CIMPA), por confiar en mí para este cargo. Estoy deseando contribuir de forma muy activa al funcionamiento de este comité de la European Mathematical Society, cuya misión es promover la unidad en el ámbito de las matemáticas, impulsando la colaboración y el intercambio de información entre sus centros, en especial en lo que respecta a la formación avanzada en investigación matemática.
P.- ¿Cómo valora la relación entre los centros SOMMa, por un lado, y los institutos de investigación europeos, por otro? ¿Qué espacios hay de mejora?
J. A.- Considero que es excelente, contamos con canales de comunicación sumamente activos, foros de trabajo colaborativo (entre los que destacan la Alianza SOMMa y ERCOM), y diversas actividades organizadas en conjunto. En este último sentido, y dentro del ámbito específico de las matemáticas, quiero resaltar el inminente Math SOMMa Meeting 2024, que se celebrará en el Centre de Recerca Matemàtica del 2 al 4 de octubre. Este congreso, organizado por los centros SOMMa de matemáticas, está dirigido a jóvenes investigadores e investigadoras, y refleja el firme compromiso de los centros españoles con la formación de las nuevas generaciones de científicos y científicas. Por supuesto, aún queda mucho camino que recorrer, y vamos a seguir trabajando con decisión en este ámbito.
P.- ¿Cuáles cree que son los principales desafíos de las Matemáticas en los próximos años?
J. A.- Como apuntaba antes, en la actualidad las matemáticas atraviesan actualmente un momento extraordinario, tanto en términos de calidad investigadora como de reconocimiento social. Estoy convencido de que en los próximos años la comunidad matemática va a continuar resolviendo problemas importantes, y también desarrollando nuevos marcos teóricos que permitirán afrontar los grandes desafíos del futuro. En esta dirección, creo que es absolutamente fundamental que seamos capaces de reforzar el atractivo de nuestra disciplina entre los más jóvenes, incorporando a un número cada vez mayor de estudiantes a carreras en matemáticas, y aumentando la participación en matemáticas de sectores tradicionalmente infrarrepresentados, notablemente mujeres, en nuestra disciplina.
P.- ¿Qué pueden aportar los institutos de investigación en la mejora de la educación matemática?
J. A.- Los centros de investigación somos, junto con el resto de la comunidad investigadora, una figura clave de cara a transmitir la importancia, la necesidad y la belleza de las matemáticas al público general. Una de nuestras aspiraciones fundamentales como sociedad es educar individuos con un sólido nivel cultural y un espíritu crítico, y las matemáticas son una pieza fundamental en este proceso. Desde el ICMAT organizamos diversas actividades dirigidas al fomento de vocaciones matemáticas, entre las que destaca el Pequeño Instituto de Matemáticas, una actividad gratuita que cada viernes del curso reúne en el ICMAT a unos 150 estudiantes de entre 12 y 18 años para enfrentarse a retos matemáticos desafiantes, en un formato accesible y estimulante.